“La cama era malísima, se notaban todos los muelles del colchón. En general el aspecto es decadente y sucio. En la recepción nos pareció que faltaba educación a la hora de saludar o despedir a la gente. Lo único bueno el desayuno y la cocinera.”
“La cama era malísima, se notaban todos los muelles del colchón. En general el aspecto es decadente y sucio. En la recepción nos pareció que faltaba educación a la hora de saludar o despedir a la gente. Lo único bueno el desayuno y la cocinera.”
Marta